jueves, 16 de noviembre de 2017

Relámpago del Catatumbo, Zulia-Venezuela



Hace ya algún tiempo en el tiempo, decidí conocer los Parques Nacionales y Monumentos Naturales   de Venezuela y leyendo acerca de ellos encontré el que lleva por nombre: 

Ciénagas de Juan Manuel de aguas claras y aguas negras.-

Una vez que ya el grupo estaba compuesto comencé la organización del viaje, conversar con nuestro anfitrión Alan Hilton, ubicar el transporte, el hospedaje, las comidas y un sin fin lleno de detalles para que nuestro viaje fuese un éxito.

Algunos llegamos vía aérea, otros vía terrestre, encontrándonos en la Ciudad de Mérida para luego trasladarnos al Sur del Estado Zulia.

Llevamos inquietud por conocer el fenómeno natural: RELÁMPAGO DEL CATATUMBO y eso nos llenaba de emoción..



El relámpago del Catatumbo es magnético, fascinante e inolvidable.-

Se puede decir que es el único en el mundo donde las descargas se presentan en intervalos de pocos minutos durante varias horas y días continuos.

En este paseo reinaron las risas, los buenos momentos, los encuentros de emociones y una que otra lagrima.

El bosque que acompaña el Río Catatumbo y el río chamita es de un verde que enamora!

Los ríos me enamoraron con su borabora, su verdor sobre el agua me encanta, en serio es ALUCINANTE!
Vi mucha fauna pero lo mas emocionante fue conocer a la Reina y al Emperador. 

Creo que fue la primera vez que vi una garza azul. Está de más decirles que es PRECIOSA.

Conocí comunidades sobre palafitos, Congo Mirador pueblito que imagino desaparecerá en el futuro y al cual recordaré haber conocido.

Ver niños pescando cangrejos desde muy temprano en la mañana en una curiara... INDESCRIPTIBLE...

Dejare que las fotos que aquí cuelgo les cuente un poco mas de nuestra experiencia conociendo y disfrutando del RELÁMPAGO DEL CATATUMBO.-








































domingo, 5 de febrero de 2017

Los Nevados, un lugar mágico entre montañas andinas

Cuando decidí ir a Mérida, me propuse conocer su gente, sus costumbres, sus pueblos entre ellos Los Nevados.



Hace ya dos años que fuí por vez primera a Los Nevados, un pueblito muy pintoresco; ubicado en lo alto de las montaña.

Podría decir que Los Nevados, es uno de los lugares más alto que he visitado ya que se encuentra a 1710 msnm.

Existen varias maneras de llegar a Los Nevados, en aquella ocasión decidimos tomar un rústico.

Que puedes concertar en la Plaza las Heroínas a las siete de la mañana, el recorrido dura aproximadamente 4 horas.

Bordeando montañas tras montañas sin perder de vista el Río Nuestra Señora, que nos acompañó durante el viaje. 

Camino a Los Nevados, hicimos una parada en un caserío llamado Mosnandá, allí comimos unos ricos pasteles.


Aprovechamos de probar y complementar el desayuno, dato muy importante cuando vamos a zonas muy frías, comer muy bien.


Luego de casi 4 horas de admirar hermosos paisajes y probar rica comida, llegamos a la puerta del pueblo  Los Nevados.


Un puebito colonial con calles de piedras, aceras diminutas y muchas casas de techos rojos, sin lugar a dudas, un pueblo hermoso.

Comenzamos a disfrutar de sus calles y es imposible no enamorarse de su gente, sus abuelos, sus niños.

Todos con sus cachetes colorados, típico del frío y el sol que apunta todo su esplendor a este lugar tan especial.

La amibilidad y espontaneidad de su gente para brindar al visitante un trato cordial y de calidad es invaluable.
Aprovenchando la distancia para llegar a la posada, no pude contenerme y tomar fotos de cada detalle que permanece en cada casa, en cada esquina.
Pero era importante volver a desayunar, uno pierde muchas calorias y se deshidrata con facilidad por el frío.
No podiamos desayunar otra cosa  que una deliciosa pizca andina, plato típico de la región andina.
Por supuesto estaba recien salida de la olla, es necesario comerla bien caliente para abrigarnos del frío con que nos recibio Los Nevados.

Luego de desayunar e instalarnos en la posada, decidimos salir a recorrer para concoer más el pueblo.

Es un pueblo pequeño que puedes pasear y conocer quizas en medio día.

Pero los que han viajado conmigo, saben que escudriño todo y a todos, me gusta pararme conversar, de repente, con la señora de la tienda.

Conocer la escuela, la bodega, el señor que vende chocolate caliente en la plaza.

Porque cada uno tiene una historia que contar, una manera de ver el pueblo Los Nevados.

De describir lo hermoso que guarda Los Nevados para ellos y para quienes lo visitan.